PUBLICADO: septiembre 4, 2025 | 2:39 pm

Día Mundial de la Salud Sexual 2025: avances y brechas en México

México 2025: menos nacimientos, pero persisten embarazo adolescente, sífilis congénita y rezagos en VIH y VPH en salud sexual.
Día Mundial de la Salud Sexual 2025: avances y brechas en México

Escucha esta noticia:

Cargando audio...

En el Día Mundial de la Salud Sexual (4 de septiembre), México exhibe en 2025 un panorama con contrastes marcados. Mientras la natalidad alcanza mínimos históricos con 1,8 millones de nacimientos en 2023 y una tasa global de fecundidad de 1,6 hijos por mujer, persisten problemas estructurales que desafían la política pública, la fecundidad adolescente continúa entre las más altas de América Latina, la maternidad infantil suma más de 56.000 partos en menores de 16 años en 2024, y los casos de sífilis congénita aumentan pese a ser prevenibles.

A ello se agregan brechas en el acceso a anticoncepción moderna, la necesidad de consolidar la prevención combinada contra el VIH y el reto de recuperar coberturas de la vacunación contra el VPH. Estos indicadores confirman que la salud sexual en México no es solo un asunto clínico, sino un desafío de equidad y justicia social que interpela directamente a las instituciones de salud pública.

Tendencias demográficas y fecundidad adolescente

México atraviesa una transición demográfica que impacta directamente en la salud sexual y reproductiva. El descenso de nacimientos y de la fecundidad total confirma el cambio poblacional, pero el embarazo adolescente sigue siendo un fenómeno persistente. La tasa específica de fecundidad adolescente alcanzó 59,3 nacimientos por cada 1.000 adolescentes de 15 a 19 años en 2024, frente a 72,3 en 2000, según OPS. Aunque la tendencia es descendente, el país sigue por encima del promedio regional y con disparidades entre entidades.

Más preocupante aún es la maternidad infantil. En 2024 se registraron más de 56.600 nacimientos de madres menores de 16 años, incluyendo 1.652 casos en niñas de 10 a 13 años, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud e INEGI. En Chiapas, una de cada cuatro adolescentes fue madre en 2023, con tasas superiores a 80 nacimientos por cada 1.000 jóvenes, lo que refleja la dimensión de la desigualdad y la urgencia de fortalecer programas territoriales de salud sexual y reproductiva.

Infecciones de transmisión sexual: sífilis congénita en aumento

La sífilis congénita se ha consolidado como un evento centinela de fallas en el control prenatal. Los boletines epidemiológicos de 2024 señalan un incremento sostenido, con focos críticos en estados del sur y municipios con alta marginación. Este repunte evidencia deficiencias en la aplicación de pruebas rápidas, la repetición de tamizajes en el tercer trimestre y el tratamiento oportuno de las parejas sexuales.

Bw700-p5-pc-sktop-banner-de-bienvenida-cs-mex-01

El reto de la atención primaria en México es asegurar que cada gestante reciba un paquete de pruebas rápidas (sífilis, VIH, hepatitis B) en la primera consulta, que exista disponibilidad de penicilina benzatínica en todos los centros de salud y que se implemente un sistema de trazabilidad nominal que permita identificar y dar seguimiento a los casos.

VIH: avances parciales y retos en prevención combinada

El comportamiento del VIH en México muestra avances parciales. Aunque se ha ampliado la cobertura de tratamiento antirretroviral y el acceso a la profilaxis preexposición (PrEP) en instituciones como el IMSS, ISSSTE y servicios estatales, los boletines de CENSIDA y ONUSIDA señalan que las nuevas infecciones no han disminuido al ritmo esperado. Más preocupante aún es el aumento de muertes relacionadas con sida en mujeres en varios estados.

La prevención combinada sigue siendo una deuda pendiente. La APS debe garantizar consejería, pruebas rápidas periódicas y acceso real a PrEP con controles trimestrales, además de estrategias comunitarias que incluyan educación, distribución de condones y vinculación con redes de apoyo.

Vacunación contra VPH: un relanzamiento estratégico

En 2024, México relanzó su campaña nacional de vacunación contra el Virus del Papiloma Humano (VPH) con apoyo de la OPS. Bajo el lema “Una dosis de futuro: + Vida – VPH”, se amplió la cobertura a niñas y niños de 9 años en adelante y se adoptaron esquemas simplificados, alineados a la recomendación de la OMS de una sola dosis.

El reto principal es consolidar la cobertura en zonas rurales y marginadas, donde históricamente las brigadas no alcanzan a cubrir a todas las cohortes escolares. Para lograr un impacto real en la reducción del cáncer cervicouterino, la vacunación debe combinarse con campañas de educación sexual, detección temprana y seguimiento de mujeres en riesgo.

Violencias de género: un determinante ineludible

La salud sexual no puede analizarse sin considerar la violencia contra las mujeres. La ENDIREH 2021, aún la referencia más robusta, mostró que más del 40% de las mujeres mexicanas han sufrido algún tipo de violencia de pareja. Estas cifras, aunque previas a 2025, siguen siendo un marco de análisis indispensable para entender cómo la violencia afecta el acceso a servicios de anticoncepción, la continuidad en controles prenatales y la disposición a buscar pruebas de ITS.

La APS debe reforzar la detección intencionada de violencia, integrar atención psicológica de primer contacto y activar protocolos intersectoriales que vinculen salud, justicia y protección social.

Prioridades urgentes para México en 2025

  • Garantizar pruebas rápidas universales en primera consulta prenatal y en poblaciones clave.
  • Ampliar la cobertura de PrEP y consejería comunitaria en VIH.
  • Recuperar y sostener la vacunación VPH, con énfasis en áreas rurales.
  • Reducir la maternidad infantil y adolescente con programas diferenciados por región.
  • Fortalecer protocolos de atención a violencias desde el primer nivel de salud.

De los diagnósticos a la justicia sexual

México llega a 2025 con claroscuros en su panorama de salud sexual. El descenso histórico de la natalidad y la expansión de estrategias como la PrEP y la vacunación contra el VPH contrastan con la persistencia del embarazo adolescente, el repunte de la sífilis congénita y la desigualdad en acceso a anticoncepción.

El lema global “Sexual Justice: What Can We Do?” interpela directamente al país, la justicia sexual no es solo acceso a servicios, sino también equidad territorial, eliminación de barreras y garantía de derechos sin discriminación. Transformar diagnósticos en resultados dependerá de la capacidad de la salud pública y en especial de la APS para llevar los compromisos internacionales al terreno local, donde cada adolescente, cada mujer y cada comunidad enfrenta de manera distinta los desafíos de ejercer su salud sexual.

Publicado por:

Temas relacionados:

RELACIONADAS

Otras noticias para ti

¡Suscríbete y recibe contenido exclusivo!