La Secretaría de Salud de Guanajuato (SSG) reforzó las acciones de prevención y detección oportuna del cáncer de mama en León, con la aplicación de más de 19 mil exploraciones mamarias y 6 mil mastografías en lo que va del año. El operativo permitió identificar 229 casos sospechosos de malignidad y confirmar 52 diagnósticos positivos, consolidando a la ciudad como un referente estatal en control oncológico, pero también evidenciando desafíos en cobertura, seguimiento y atención integral.
Detección activa y resultados concretos
En el marco del Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Mama, la Secretaría de Salud de Guanajuato informó que, durante 2025, se han realizado 17,654 exploraciones clínicas de mama a mujeres mayores de 25 años y 6,060 mastografías en los Hospitales General de León y Materno Infantil.
De estas acciones derivaron 229 estudios con hallazgos sospechosos (clasificados como BIRADS 4 y B5), de los cuales 52 casos fueron confirmados como cáncer de mama. El rango de edad de las pacientes oscila entre los 36 y los 88 años, con una media de 53 años, lo que refleja el perfil de riesgo más frecuente en la población mexicana.
El titular de la SSG, Gabriel Cortés Alcalá, destacó que estos resultados reflejan los esfuerzos sostenidos de la jurisdicción sanitaria VII para consolidar una red preventiva sólida y funcional. “El cáncer de mama no distingue edad, condición social ni antecedentes familiares; por eso, la detección temprana es la herramienta más eficaz para salvar vidas”, afirmó el funcionario estatal.
León, un referente en estrategias de prevención
El municipio de León se mantiene entre los territorios con mayor cobertura en detección temprana en el estado. Según la City Cancer Challenge Foundation (C/Can), en 2024 registró una tasa de incidencia de 14,04 casos nuevos por cada 100 000 habitantes y una tasa de mortalidad de 6,32 por 100 000 habitantes, indicadores que, aunque menores a la media nacional, confirman la urgencia de fortalecer los programas de diagnóstico y seguimiento continuo.
Estas cifras se insertan en un contexto nacional donde el cáncer de mama continúa siendo la primera causa de muerte por cáncer en mujeres mexicanas. Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señalan que en 2023 se registraron 8034 fallecimientos por esta causa, lo que representa una tasa de 17,9 por cada 100 000 mujeres mayores de 20 años. La carga oncológica sigue creciendo pese a los avances en infraestructura y promoción, lo que exige estrategias de largo alcance que trasciendan los meses conmemorativos.
Prevención constante y cultura de la autoexploración
La Secretaría de Salud mantiene una estrategia permanente de prevención, centrada en tres pilares:
- Autoexploración mensual a partir de los 20 años.
- Examen clínico anual desde los 25 años.
- Mastografía cada dos años en mujeres de 40 a 69 años.
Estas acciones están alineadas con las guías nacionales de detección temprana del cáncer de mama y buscan generar una cultura preventiva sostenida. En este sentido, la dependencia promueve campañas de capacitación para profesionales de salud y jornadas itinerantes en zonas rurales y urbanas, garantizando el acceso equitativo a servicios diagnósticos.
La SSG también ha reforzado el trabajo comunitario a través del programa “Octubre Rosa”, que se extiende a todo el año mediante ferias de salud, talleres educativos y atención directa en unidades médicas jurisdiccionales. Esta labor ha permitido identificar de manera oportuna casos en etapas tempranas, donde el tratamiento tiene mayores probabilidades de éxito y menor impacto en la calidad de vida de las pacientes.
Cáncer de mama: una enfermedad que no distingue fronteras
A nivel global, el cáncer de mama es el tipo de cáncer más diagnosticado y representa aproximadamente el 11,7% de todos los casos nuevos de cáncer en mujeres, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). En México, la tendencia se mantiene al alza debido al envejecimiento poblacional, estilos de vida poco saludables y desigualdades en el acceso al diagnóstico.
Aunque la mastografía sigue siendo el método más efectivo de detección temprana, persisten barreras estructurales: falta de cobertura universal, limitaciones en equipamiento de imagenología, insuficiencia de personal capacitado y estigma social que retrasa la consulta. La OMS y la OPS recomiendan fortalecer los sistemas locales de vigilancia oncológica, digitalizar los registros de pacientes y promover alianzas interinstitucionales para ampliar la detección gratuita y oportuna.
Un compromiso que debe trascender octubre
El caso de Guanajuato refleja el impacto tangible de las políticas públicas sostenidas, pero también recuerda que el verdadero desafío radica en mantener la vigilancia constante más allá de las fechas conmemorativas. La detección temprana salva vidas, siempre que esté acompañada de seguimiento clínico, diagnóstico confirmatorio oportuno y acceso a tratamientos integrales.
El cáncer de mama sigue siendo una prioridad sanitaria nacional y requiere continuidad en las acciones comunitarias, presupuestales y educativas. Mientras cada exploración sea una oportunidad para prevenir una muerte, la inversión en detección será siempre la más rentable para el sistema de salud y, sobre todo, para las mujeres mexicanas.