En el marco del Día Internacional de las Personas Cuidadoras, conmemorado cada 5 de noviembre, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) destacó el papel esencial de quienes brindan apoyo a personas en situación de dependencia, discapacidad o edad avanzada. Bajo la dirección general de Martí Batres Guadarrama, la institución reafirmó su compromiso con la promoción del bienestar integral de su derechohabiencia a través de programas que incluyen atención física, emocional y social.
De acuerdo con María Cristina Jacuinde Villaseñor, coordinadora de la Casa de Día del ISSSTE en Morelia, Michoacán, la labor de cuidado constituye un componente indispensable del sistema de salud social, pues implica acompañamiento en actividades de la vida diaria como aseo, movilidad, alimentación, administración de medicamentos y apoyo emocional. “Su principal labor es apoyar en las actividades de personas vulnerables, en alimentación, traslado, limpieza, entretenimiento y, asimismo, ser un soporte social y emocional”, destacó.
Este reconocimiento no solo pone en relieve el valor del trabajo de cuidado, sino que también visibiliza la necesidad de fortalecer las condiciones laborales, la capacitación y el apoyo institucional para quienes ejercen esta función. En México, la transición demográfica hacia una población más envejecida incrementa la demanda de cuidados especializados, lo que posiciona a las personas cuidadoras como un pilar de la atención social y sanitaria.
¿Cómo impactan las Casas de Día y los programas del ISSSTE en la atención de adultos mayores y personas con discapacidad?
El ISSSTE ha desarrollado una red de servicios que busca garantizar el bienestar y la inclusión social de los sectores más vulnerables. Entre ellos destacan las Estancias para el Bienestar y Desarrollo Infantil (EBDI), las Casas de Día, el Centro de Convivencia para Pensionados y Jubilados “Convive” y el Centro de Estudios y Apoyo al Adulto Mayor (CEAAM). Estas iniciativas proporcionan acompañamiento gerontológico, actividades recreativas y apoyo emocional, con el objetivo de mejorar la calidad de vida y prevenir el aislamiento social.
En Morelia, Michoacán, la Casa de Día del ISSSTE ofrece una amplia gama de actividades culturales y deportivas, como pintura, bisutería, tai chi, bailes de salón y yoga, que promueven la salud física y mental. Con una plantilla de 17 instructores y un equipo interdisciplinario, el centro atiende diariamente entre 120 y 130 personas, y mensualmente alcanza hasta 740 participantes, entre adultos mayores, personas con discapacidad y familiares derechohabientes.
La oferta de servicios y espacios de convivencia refuerza la visión del ISSSTE como una institución que no solo brinda atención médica, sino también promueve la salud social y comunitaria. Este enfoque integral busca que los adultos mayores y personas en situación de dependencia mantengan su autonomía funcional y bienestar emocional.
¿Qué papel juega el reconocimiento institucional de las personas cuidadoras en la política pública del bienestar social?
El reconocimiento formal de las personas cuidadoras por parte del ISSSTE se alinea con la agenda de bienestar impulsada por el Gobierno Federal, en el marco del llamado “Segundo Piso de la Cuarta Transformación”, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. Según Jacuinde Villaseñor, este respaldo “ha sido muy gratificante y motivador”, pues refleja una política pública más cercana y comprometida con los grupos que sostienen el cuidado y la atención de la población dependiente.
Este tipo de acciones, aunque simbólicas, tienen un alto valor estratégico para fortalecer las redes institucionales de apoyo. El reconocimiento también contribuye a visibilizar las brechas estructurales en torno al trabajo de cuidado, tradicionalmente no remunerado o invisibilizado, y a promover una mayor profesionalización de este sector dentro del sistema público de salud.
En la práctica, reconocer y fortalecer la labor de las personas cuidadoras representa una inversión social que puede reducir la sobrecarga en los servicios hospitalarios, mejorar la adherencia a tratamientos crónicos y fomentar una cultura de corresponsabilidad en la atención a personas mayores o con discapacidad.
El ISSSTE refuerza su modelo de atención centrado en el bienestar integral
El modelo de atención del ISSSTE se consolida como un referente de cuidado integral, que articula componentes asistenciales, educativos y recreativos con un enfoque de salud preventiva. La combinación de servicios médicos y espacios comunitarios permite abordar la salud desde una perspectiva biopsicosocial, elemento esencial ante el aumento de enfermedades crónicas y el envejecimiento poblacional.
Con este reconocimiento, el ISSSTE reafirma su papel como una institución pública que promueve el desarrollo humano, la dignidad y la inclusión. La valoración del trabajo de las personas cuidadoras, así como la consolidación de programas sociales para adultos mayores, marcan un avance hacia políticas de salud más humanas y sostenibles.
El fortalecimiento de estas estrategias podría convertirse en un modelo replicable en otros sistemas de seguridad social de América Latina, donde el envejecimiento poblacional y la carga de cuidado representan desafíos crecientes.



