El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) inauguró la primera ludoteca gerontogeriátrica en el Hospital General “Dr. Darío Fernández Fierro”, en la Ciudad de México. Esta iniciativa marca un hito dentro del sistema público de salud al incorporar espacios terapéuticos dirigidos específicamente a pacientes mayores de 60 años, con el propósito de fortalecer su bienestar físico, emocional y cognitivo.
El proyecto, encabezado por la Coordinación Nacional de Ludotecas Pediátricas y Gerontológicas, responde al eje de Trato Digno impulsado por el director general Martí Batres Guadarrama, alineado con la política de atención humanista que promueve la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
¿Cómo busca la ludoteca gerontogeriátrica mejorar la salud integral de los adultos mayores hospitalizados?
La ludoteca gerontogeriátrica del ISSSTE ofrece un modelo innovador en la atención hospitalaria, basado en la ludoterapia y la estimulación cognitiva como herramientas de apoyo a la recuperación física y emocional. El espacio brinda actividades como gimnasia cerebral, terapia ocupacional, dinámicas recreativas y ejercicios de convivencia grupal, en un ambiente accesible y seguro.
Según la gerontóloga Irma Guadalupe Muñoz Córdoba, encargada del nuevo espacio, las actividades están diseñadas para mejorar la coordinación motora, la memoria y el estado anímico de los pacientes, promoviendo un enfoque integral en su tratamiento. En promedio, 12 personas mayores son atendidas diariamente en un horario de lunes a viernes, de 7:00 a 16:00 horas.
Este enfoque refuerza la tendencia de los hospitales a incorporar intervenciones no farmacológicas para el manejo del estrés, la ansiedad y el deterioro cognitivo en adultos mayores. En un contexto donde las enfermedades crónicas no transmisibles representan el 80% de las causas de hospitalización en el ISSSTE, la implementación de estrategias psicosociales cobra especial relevancia.
¿Qué impacto puede tener este modelo en la red hospitalaria del ISSSTE y en la política de Trato Digno?
La apertura de este primer espacio físico gerontogeriátrico constituye un precedente dentro del sistema hospitalario público. Según Lorena Sandra Villeda Salazar, coordinadora nacional de Ludotecas Pediátricas y Gerontológicas, esta acción refleja “el enfoque humano de la estrategia Trato Digno” y materializa un compromiso institucional con la atención diferenciada por ciclo de vida.
El ISSSTE proyecta ampliar el modelo mediante la ludoterapia móvil, que ya opera en el Hospital Regional “Lic. Adolfo López Mateos” y el Hospital General de Tlaxcala. Estos servicios permiten acercar la atención lúdica a pacientes encamados o con movilidad limitada, garantizando continuidad terapéutica y fortaleciendo la empatía en el entorno hospitalario.
Además, la estrategia se enmarca en los lineamientos del Segundo Piso de la Cuarta Transformación, orientado a consolidar un sistema de salud más humano, equitativo y centrado en la persona. Este tipo de programas favorece la humanización de la atención hospitalaria, contribuyendo a reducir la carga emocional del paciente y a mejorar la percepción institucional del servicio público de salud.
La ludoterapia como herramienta terapéutica y social en el envejecimiento saludable
La evidencia científica respalda los beneficios de la estimulación cognitiva y la actividad lúdica en la población adulta mayor. Diversos estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) destacan que las actividades recreativas estructuradas contribuyen a disminuir síntomas depresivos, mejorar la función ejecutiva y retrasar la dependencia funcional.
El ISSSTE, al incorporar esta práctica dentro de su infraestructura hospitalaria, se suma a una corriente internacional que reconoce la importancia de los determinantes sociales del envejecimiento saludable. Este tipo de intervenciones integran la dimensión psicosocial en los planes de rehabilitación, un componente tradicionalmente subestimado dentro de la atención médica institucional.
La accesibilidad arquitectónica de la ludoteca, sin escaleras, con acceso directo a servicios básicos y espacios amplios, también responde a criterios de seguridad hospitalaria y diseño universal, esenciales para los adultos mayores con limitaciones de movilidad.
Experiencias de pacientes y fortalecimiento del enfoque humanista
El impacto emocional positivo de estas acciones se refleja en los testimonios de los propios usuarios. Amalia Arteaga Ramos, pensionada y derechohabiente, expresó que “uno se relaja aquí, se siente con confianza y es un servicio que nos favorece mucho”. Este tipo de experiencias respaldan la necesidad de espacios que favorezcan la interacción social y la autorregulación emocional durante la hospitalización.
La ludoterapia no sólo se limita a los adultos mayores. El ISSSTE mantiene una red de ludotecas pediátricas en hospitales como el “Lic. Adolfo López Mateos”, “1° de Octubre”, “Tacuba”, “Dr. Darío Fernández Fierro” y el Hospital de Alta Especialidad de Morelia, donde se ha logrado reincorporar a más de 2.100 pacientes pediátricos a sus actividades escolares tras su recuperación.
La coexistencia de ambos programas, pediátricos y gerontológicos, fortalece una visión institucional de acompañamiento integral durante las etapas más vulnerables del ciclo vital, asegurando un trato digno y humanizado en todos los niveles de atención.
Hacia un modelo de atención geriátrica humanista e integral
La inauguración de la primera ludoteca gerontogeriátrica del ISSSTE representa un avance simbólico y funcional en la atención al adulto mayor. Este modelo de intervención no sólo mejora la experiencia hospitalaria, sino que se perfila como una herramienta complementaria en la política de envejecimiento activo y saludable.
Al integrar la ludoterapia como parte del cuidado clínico, el ISSSTE fortalece la dimensión psicosocial de la salud pública y abre la puerta a la replicabilidad del modelo en otros hospitales del país. En un contexto de envejecimiento poblacional acelerado, estas iniciativas pueden convertirse en un componente estratégico del sistema nacional de salud para garantizar calidad, calidez y dignidad en la atención al adulto mayor.



