En respuesta al reciente brote de sarampión detectado en distintas entidades federativas, el Gobierno de México activó una estrategia nacional de contención respaldada por evidencia científica y liderada por expertos de alta trayectoria en el ámbito médico y epidemiológico.
Durante la conferencia matutina del Gobierno Federal, el secretario de Salud, Dr. David Kershenobich Stalnikowitz, afirmó que las medidas adoptadas tienen como objetivo preservar la salud pública y evitar que el sarampión, una de las enfermedades más contagiosas del mundo, se expanda más allá de los casos ya detectados. En este contexto, se dio a conocer la creación de un Comité Nacional de Expertos en Arbitraje Epidemiológico, con el fin de asesorar técnicamente las decisiones del sistema de salud.
Un comité de alto nivel para enfrentar el sarampión
El subsecretario de Políticas de Salud y Bienestar Poblacional, Dr. Ramiro López Elizalde, explicó que las acciones implementadas responden a un análisis riguroso de riesgo, tasas de reproducción del virus (R₀) y evidencia clínica. “No se trata de decisiones improvisadas”, subrayó. El plan contempla cercos epidemiológicos, refuerzo vacunal y monitoreo intensivo en zonas afectadas.
Los 14 integrantes del comité fueron seleccionados por su experiencia en infectología, inmunología, pediatría y epidemiología. Entre ellos destacan:
- Dra. Celia Mercedes Alpuche Aranda, directora general adjunta del CIENI-INSP.
- Dra. Noris Pavía Ruiz, jefa de la Clínica para niños con inmunodeficiencia del HIMFG.
- Dr. Alejandro Macías, médico internista e infectólogo con amplia trayectoria en salud pública y enfermedades emergentes.
- Dr. José Ignacio Santos Preciado, académico e investigador del Programa de Maestría y Doctorado en Ciencias Médicas de la UNAM.
- Dr. Jon Andrus, exsubdirector de la Organización Panamericana de la Salud y referente internacional en inmunizaciones.
Este grupo será responsable de asesorar las medidas de contención, evaluar la pertinencia de refuerzos vacunales y recomendar acciones correctivas ante fallas sistémicas en el esquema de vacunación universal.
Avances y cifras recientes: diagnóstico situacional del brote
En su intervención, López Elizalde presentó un diagnóstico actualizado. Si bien no se especificó la cifra total de contagios, se mencionó que los casos confirmados están distribuidos en al menos cinco entidades. La situación es controlable si se garantiza una cobertura oportuna de vacunación, particularmente con la triple viral (SRP) que protege contra el sarampión, la rubéola y la parotiditis.
El número reproductivo básico del sarampión (R₀) oscila entre 12 y 18, lo que lo posiciona como una de las infecciones más transmisibles. En comparación, el R₀ de la COVID-19 en su cepa original era de entre 2.5 y 3.5. La alta tasa de contagio del sarampión justifica la urgencia de implementar estrategias preventivas.
Entre las medidas ya aplicadas se incluyen:
- Cercos epidemiológicos en zonas de casos positivos.
- Bloqueos vacunales en comunidades vulnerables.
- Intensificación de la vigilancia epidemiológica activa.
- Campañas educativas con enfoque en prevención y signos de alarma.
La importancia de no bajar la guardia en vacunación
La baja cobertura de esquemas completos de vacunación en algunas regiones del país ha sido identificada como un factor de riesgo clave. Según datos oficiales, el rezago en la cobertura SRP infantil se incrementó durante los años de pandemia, especialmente en zonas rurales y periurbanas.
El Comité Nacional de Expertos tiene entre sus prioridades restaurar la confianza en la vacunación, actualizar esquemas en rezago y reforzar la logística de distribución de vacunas, especialmente en estados con mayor vulnerabilidad.
“La vacunación es nuestra primera línea de defensa. Si no aseguramos una cobertura sostenida, abrimos la puerta a rebrotes que ponen en riesgo vidas evitables”, señaló Dra. Mercedes Macías Parra, directora del INP.
Recomendaciones al personal médico y la población
Durante la conferencia, se reiteraron las recomendaciones esenciales tanto para profesionales de la salud como para la ciudadanía:
- Verificar y completar esquemas de vacunación en niños menores de 5 años.
- Reportar de inmediato cualquier caso sospechoso de fiebre con exantema.
- Promover el uso de mascarillas y aislamiento temporal en casos sospechosos.
- Mantener registros clínicos y de vacunación actualizados en unidades de salud.
El comité también hace un llamado a los directivos de clínicas, hospitales y centros educativos a implementar medidas de vigilancia activa, coordinar con las jurisdicciones sanitarias locales y participar en jornadas informativas para el personal de salud.
Un modelo de coordinación científica y política para la respuesta en salud
Con la conformación de este comité interdisciplinario y la ejecución de acciones coordinadas a nivel federal y estatal, México refuerza su capacidad de respuesta ante emergencias sanitarias, apoyándose en la evidencia y en el trabajo conjunto entre instituciones y academia.
“El objetivo es claro: proteger a la población y evitar que enfermedades prevenibles pongan en riesgo los avances en salud pública”, concluyó el Dr. Kershenobich.
La conformación del comité, la transparencia en el manejo de datos, y el involucramiento de expertos de alto nivel marcan una diferencia sustancial frente a respuestas reactivas del pasado. La coyuntura del sarampión se convierte así en una oportunidad para fortalecer la cultura de prevención, la confianza ciudadana en el sistema de salud y la resiliencia institucional ante futuras amenazas sanitarias.
