Ante la persistente crisis de desabasto de medicamentos que afecta a millones de mexicanos, especialmente a pacientes con enfermedades crónicas como el cáncer, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció un decreto para incentivar la inversión de farmacéuticas internacionales en la producción local de medicamentos e insumos médicos. Esta estrategia busca reducir la dependencia de las importaciones, bajar costos y fortalecer la capacidad productiva nacional, con el respaldo de la empresa estatal Birmex y un nuevo modelo de contratación con preferencia para empresas que inviertan en México.
Incentivos para inversión extranjera y producción local
Durante su conferencia de prensa matutina, Sheinbaum detalló que el decreto estará orientado a atraer a compañías farmacéuticas de India, Europa, Estados Unidos y América Latina, que instalen plantas de producción en México. Enfatizó que «les ofrecemos tratos preferenciales y mayores posibilidades de ganar las licitaciones», señalando que la iniciativa busca no solo reducir el desabasto, sino también hacer que los medicamentos sean «todavía más económicos».
La mandataria aseguró que esta estrategia incluye la participación conjunta entre la industria extranjera y los institutos de investigación nacionales para el desarrollo de medicinas adaptados a las enfermedades presentes en México, como el dengue, especialmente en zonas tropicales. Esta articulación podría potenciar la innovación local y la transferencia tecnológica, aspectos cruciales para el fortalecimiento del sector farmacéutico nacional.
Fortalecimiento de Birmex y modernización de la contratación pública
Birmex, la empresa estatal encargada de la adquisición y producción de farmacos, ha sido identificada como un eje central para revertir la crisis. Sheinbaum reconoció que Birmex enfrentó irregularidades y una disminución significativa de su capacidad durante las políticas neoliberales previas. Enfatizó que el decreto vinculará las inversiones extranjeras a la reactivación y recuperación productiva de Birmex.
Para el periodo 2025-2026, el Gobierno planea una inversión histórica de 130.000 millones de pesos en la compra de medicamentos, implementando un modelo de contratación basado en sistemas digitales para aumentar la transparencia y eliminar corrupción, que ha sido uno de los factores que han contribuido al desabasto. La presidenta explicó que «en la compra del 2026, que va a ser para 2027 y 2028, ya vengan puntos de calificación a todos los que participen en licitaciones, invitaciones para que tengan plantas instaladas en México».

El subsecretario de Integración Sectorial, Eduardo Clark, confirmó que se dará «una notable preferencia a empresas que decidan instalarse en México», con el objetivo de reducir el gasto en importación de medicinas, que actualmente asciende a 300.000 millones de pesos cada dos años.
El desabasto es una crisis persistente
México enfrenta desde hace varios años una crisis de desabasto de medicamentos que afecta a hospitales públicos y a millones de pacientes. Las denuncias de corrupción, ineficiencia y fallas en el sistema de adquisición pública han aumentado, especialmente desde la centralización de compras implementada al inicio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Esta centralización, que buscaba acabar con la corrupción, derivó en un caos administrativo que provocó que el desabasto alcanzara en 2024 niveles de hasta un 30% en ciertos medicamentos.
Esta situación ha generado dificultades particularmente graves para personas con enfermedades como el cáncer, quienes dependen de tratamientos continuos y de acceso oportuno a medicinas especializados.
Polos de Desarrollo Económico para el Bienestar (PODECOBI)
El decreto también establece que las inversiones farmacéuticas deberán realizarse a través de los Polos de Desarrollo Económico para el Bienestar (PODECOBI), un mecanismo estatal que facilitará la coordinación y el desarrollo regional de capacidades productivas. Esta medida pretende optimizar la infraestructura existente y garantizar la integración logística necesaria para asegurar el abasto.
Sheinbaum afirmó que “queremos que todo esto esté vinculado con Birmex, que es la empresa que históricamente fabricó vacunas para el pueblo de México y que en el periodo neoliberal prácticamente desapareció, y que tiene muchísimas instalaciones con capacidad”.
Producción local, investigación y autonomía sanitaria
El secretario de Salud, David Kershenobich, explicó que la prioridad será la compra de medicinas genéricos a empresas que inviertan en México, además de comprometerse con el desarrollo local. “Es clave que México se convierta en un hub logístico que integre la industria química para asegurar el abasto de principios activos con los que se elaboran los medicamentos”, dijo.
Con esta visión, el Gobierno mexicano busca reducir su dependencia de proveedores extranjeros, fortalecer la autonomía sanitaria y fomentar el crecimiento del sector farmacéutico nacional. Además, se espera que esta política contribuya a dinamizar la economía local mediante la generación de empleo y transferencia tecnológica.
La propuesta de Sheinbaum representa un esfuerzo integral para resolver un problema estructural que afecta la salud pública en México. Al combinar incentivos para la inversión extranjera, fortalecimiento institucional de Birmex y modernización del sistema de compras, el Gobierno apuesta a un modelo que podría mejorar la disponibilidad y reducir los costos de medicinas a mediano plazo.
Sin embargo, el éxito dependerá del adecuado seguimiento a la implementación del decreto, la transparencia en las licitaciones, y la capacidad real de las empresas para establecer y operar plantas productivas en territorio mexicano.