En el marco del Día Mundial de la Obesidad, que se conmemora cada 4 de marzo, la Secretaría de Salud ha emitido un llamado urgente a la población para sumarse a la lucha contra la obesidad, una enfermedad que afecta al 37.3 % de la población adulta en México con sobrepeso y al 38.9 % con obesidad, según datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) Continua 2023. Esta situación, advierten especialistas, es el punto de partida de enfermedades crónicas como la diabetes, el cáncer y la hipertensión arterial, además de contribuir al deterioro de la calidad de vida de millones de personas.
Escenario actual: altos índices de sobrepeso y obesidad
De acuerdo con Ensanut 2023, el 13.2 % de prevalencia de obesidad en mujeres supera la de los hombres, mientras que el sobrepeso es 13.7 % más común en la población masculina. El panorama es aún más preocupante si se considera que el 38.1 % de los adolescentes, de 12 a 19 años, también lidia con sobrepeso u obesidad.
Además, la brecha entre zonas rurales y urbanas resulta significativa. La Ensanut señala que la prevalencia en municipios rurales alcanza el 40.2 %, más alta que el 38.6 % de las áreas urbanas. Esta situación pone de manifiesto la necesidad de adaptar las políticas públicas de acuerdo con las características socioeconómicas y culturales de cada región.
La obesidad, origen de enfermedades crónicas
La coordinadora de la Clínica de Obesidad del Hospital Juárez de México, Elizabeth Pérez Cruz, señaló que la obesidad es el detonante de múltiples padecimientos crónicos. Entre ellos destacan:

- Diabetes: la resistencia a la insulina es mayor en personas con exceso de grasa corporal.
- Cáncer: algunos tipos, como el de mama y colon, están estrechamente vinculados al sobrepeso.
- Hipertensión arterial: el exceso de peso aumenta el esfuerzo cardíaco.
- Dislipidemias (colesterol alto y triglicéridos elevados): factores de riesgo cardiovascular.
- Problemas articulares: el peso excesivo afecta rodillas, caderas y columna.
Según la especialista, la obesidad no es solo un tema estético, sino una enfermedad multifactorial que compromete gravemente la salud de quienes la padecen, repercutiendo en su calidad de vida y en la sostenibilidad de los sistemas de salud.
Nuevo enfoque de diagnóstico, más allá del índice de masa corporal
Históricamente, el índice de masa corporal (IMC) ha sido la principal referencia para definir si una persona tiene sobrepeso u obesidad. Sin embargo, la Dra. Pérez Cruz enfatiza en un nuevo enfoque que prioriza la composición corporal. De esta manera, se mide el porcentaje de grasa y músculo en el organismo.
Por ejemplo, una persona con un IMC dentro del rango normal, pero que presente alta acumulación de grasa visceral o circunferencia abdominal elevada, puede considerarse en riesgo. Esta perspectiva más detallada permite identificar casos de obesidad oculta y evaluar adecuadamente el estado de salud de cada individuo.
Medidas de prevención y promoción de la salud
Con el fin de disminuir la incidencia de la obesidad y sus complicaciones, la Secretaría de Salud promueve diversas acciones:
- Nutrición adecuada: la ingesta de frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras es fundamental.
- Actividad física regular: al menos 30 minutos al día de ejercicio moderado.
- Consulta médica oportuna: el diagnóstico y tratamiento temprano son esenciales para evitar complicaciones.
- Etiquetado frontal de alimentos: esta herramienta legislativa protege el derecho a la información y ayuda a reducir el consumo de azúcares, grasas y sodio, especialmente en niños y adolescentes.
En palabras de la coordinadora, «La prevención y detección temprana pueden cambiar el rumbo de esta enfermedad, que ya se ha convertido en epidemia en México».
Iniciativas gubernamentales para frenar la obesidad
El Gobierno de México ha puesto en marcha estrategias integrales con el fin de fomentar estilos de vida saludables y combatir la obesidad desde edades tempranas. Entre los programas más destacados se encuentran:
- Vive Saludable, Vive Feliz: dirigido a escuelas de educación básica, promueve la actividad física diaria y la buena alimentación.
- 3 X MI SALUD: impulsado por la Subsecretaría de Políticas de Salud y Bienestar Poblacional, pretende generar consciencia en la población adulta sobre la importancia de mantener un peso saludable y prevenir enfermedades crónicas.
Estas iniciativas también buscan fortalecer la educación en salud, considerando que los hábitos adquiridos en la infancia y la adolescencia influyen en la prevalencia de la obesidad en la edad adulta.
Las acciones individuales, como el control periódico de peso, la lectura de etiquetas nutrimentales y la práctica de ejercicio, constituyen los primeros pasos para reducir la incidencia de la obesidad. Asimismo, la integración de políticas de salud ocupacional en las empresas puede contribuir a generar entornos laborales más saludables.