Durante su participación en la Asamblea “Salud Casa por Casa” en Acapulco, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, presentó oficialmente la rehabilitación del HGR – Hospital General Regional No. 1 “Vicente Guerrero”, una de las infraestructuras médicas más afectadas por el paso del huracán Otis en octubre de 2023. Esta unidad, considerada el hospital público más grande del estado de Guerrero, fue objeto de una intervención profunda que permitió no solo su restauración estructural, sino su integración como pieza clave dentro del nuevo modelo de atención preventiva territorial que impulsa el Gobierno de México.
“El hospital Vicente Guerrero es como si hubiera vuelto a nacer”, expresó Robledo, quien subrayó que esta rehabilitación simboliza mucho más que una reparación física: representa un compromiso renovado con la salud pública y con el acceso equitativo a los servicios médicos en contextos de alta vulnerabilidad.
Un hospital resiliente como símbolo de transformación
La recuperación del HGR No. 1 fue destacada como un esfuerzo institucional que honra el compromiso inquebrantable del personal de salud. “El personal médico y de Enfermería nunca abandonó su labor pese a las adversidades”, afirmó el titular del IMSS, reconociendo la resiliencia de quienes mantuvieron operativa la atención médica durante la emergencia.
Actualmente, el hospital cuenta con 500 camas disponibles, distribuidas en 350 para hospitalización y 150 para servicios complementarios. Sin embargo, Robledo advirtió que la infraestructura, por sólida que sea, no reemplaza la importancia de un sistema preventivo eficaz. “Nada va a ser mejor que la prevención. Por más grande que sea un hospital, la prevención siempre le va a ganar, porque es llegar a tiempo”, enfatizó.
De la atención hospitalaria al territorio: Salud Casa por Casa
Uno de los puntos centrales de la intervención del director del IMSS fue la presentación del programa Salud Casa por Casa, una estrategia que lleva servicios médicos directamente a los hogares de personas en situación de vulnerabilidad. Esta iniciativa busca anticiparse a la enfermedad y reducir el ingreso de pacientes en estado crítico a los hospitales, especialmente en zonas marginadas o de difícil acceso.

El enfoque territorial impulsado por el programa se alinea con la visión de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien encabezó la asamblea junto con autoridades federales y estatales, entre ellas la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, y el secretario de Salud, Dr. David Kershenobich. La estrategia se plantea como un cambio de paradigma en la gestión de la salud pública, pasando de un modelo reactivo a uno preventivo, con énfasis en el contacto comunitario.
“Muchas veces la llegada al hospital significa que ya las instituciones fuimos tarde”, subrayó Robledo, haciendo hincapié en la necesidad de fortalecer la medicina preventiva como eje estructural de la transformación sanitaria.
Salud con convicción y cercanía con la rehabilitación del HGR
En su discurso, Zoé Robledo destacó que el verdadero motor del sistema de salud en Guerrero no son las instalaciones ni los equipos, sino “su gente”, a quienes definió como “guerrerenses y guerreros al mismo tiempo”. En este contexto, valoró el esfuerzo del personal del IMSS que, con maletines al hombro, recorre comunidades montañosas y zonas aisladas para brindar atención a personas adultas mayores y con discapacidad.
“En esos maletines no solo va equipo médico, va convicción, causa y mucho corazón”, señaló, en un reconocimiento explícito al compromiso ético y humano del cuerpo médico y de Enfermería del IMSS en la región.
Un modelo replicable hacia otros territorios
La experiencia de rehabilitación del hospital Vicente Guerrero y la implementación del modelo territorial de atención sanitaria en Guerrero se perfilan como referentes a nivel nacional. La confluencia de infraestructura hospitalaria, estrategias de salud comunitaria y resiliencia institucional podría marcar una ruta replicable en otras entidades con desafíos similares en materia de cobertura, acceso y respuesta frente a emergencias.
Asimismo, el programa Salud Casa por Casa refuerza los principios de equidad, justicia territorial y eficiencia preventiva, en línea con el nuevo enfoque de salud pública impulsado desde el nivel federal.