El cáncer sigue siendo una de las principales causas de mortalidad en México. Según datos del INEGI, en 2023 se registraron 91,562 muertes por tumores malignos, representando el 11.4% del total de defunciones en el país. La tasa de mortalidad nacional fue de 70.8 fallecimientos por cada 100 mil habitantes, con Chihuahua, Baja California Sur y Sonora presentando las cifras más altas, , mientras que Guerrero y Oaxaca presentan los menores índices.
Este panorama refleja una tendencia creciente en la carga de esta enfermedad, impulsada por factores como el envejecimiento de la población, el aumento en la exposición a factores de riesgo y las barreras en el acceso oportuno a la detección y tratamiento.
Entre las mujeres, el cáncer de mama sigue encabezando la lista de mortalidad, seguido del cáncer cervicouterino y el colorrectal. A pesar de los esfuerzos en prevención, el diagnóstico tardío sigue siendo una barrera importante en la lucha contra esta enfermedad, lo que enfatiza la necesidad de reforzar la cobertura de mastografías y pruebas de detección. En el caso de los hombres, el cáncer de próstata continúa siendo el de mayor letalidad, seguido por el cáncer colorrectal y el de estómago. En este grupo, la falta de cultura de prevención y la baja adherencia a chequeos médicos han sido factores determinantes en el diagnóstico tardío.
En la población infantil y adolescente, la leucemia representa el cáncer más común, lo que plantea la urgencia de fortalecer las estrategias de atención temprana y mejorar el acceso a tratamientos innovadores que incrementen las tasas de supervivencia en este sector.
Muertes por cáncer en México: ¿únicamente ligada al envejecimiento?
Los datos más recientes sobre la mortalidad por cáncer en México confirman que la edad es un factor clave en la incidencia de esta enfermedad. La tasa de defunciones por cáncer aumenta progresivamente con la edad, alcanzando su punto más alto en la población de 80 años y más, con 755.8 muertes por cada 100 mil habitantes. Según la OMS, este comportamiento se debe a la acumulación de factores de riesgo ambientales y de estilo de vida, combinados con una disminución en la eficiencia de los mecanismos de reparación celular.
Por género, los hombres presentan una mayor tasa de mortalidad en la mayoría de los grupos etarios. Sin embargo, entre los 30 y 59 años, las mujeres superan a los hombres en incidencia de muertes por cáncer, debido a la alta prevalencia de tumores como el cáncer de mama y el cáncer cervicouterino, que afectan a este grupo de edad de manera significativa.
«Para las mujeres, a partir de los 30 años, la tasa más alta de mortalidad se debió al tumor maligno de la mama; en los hombres de 30 a 59 años fue por el tumor maligno del colon, del recto y del ano, y en los hombres de 60 años y más fue por el tumor maligno de la próstata» – INEGI.
En cuanto a los jóvenes, los datos reflejan una realidad preocupante: la leucemia es el cáncer más común y mortal en la población de 0 a 29 años, con una tasa de 2.9 muertes por cada 100 mil hombres en el grupo de 20 a 29 años. Esto subraya la necesidad de fortalecer las estrategias de diagnóstico temprano y garantizar acceso oportuno a tratamientos efectivos.
